En el 2017 se cumplen los cien años del comienzo de la labor de adoquinado de las calles del casco urbano de la ciudad de Rocha. Dicho episodio constituye un hito fundamental en el desarrollo de la ciudad representando el pasaje de un conglomerado urbano antiguo a uno moderno.
La mayúscula intervención realizada en un proceso de 15 años aproximadamente (1917-1930), significó poner la friolera de más de ocho millones de adoquines de granito en las vías de tránsito, sin contar los 58.000 metros lineales de cordón. Tal tarea implicó el movimiento de casi 100.000 toneladas de piedra. Transportados desde el Cerro Áspero al pueblo en chatas tiradas por caballos, hoy en día hubiera significado emplear 45.000 viajes de camiones de 10 m3, (en el supuesto de que se pudiera cargar en ellos dicha cantidad de piedra).
La permanencia actual de más del 75% del mismo, le da a dicha obra una significación especial, constituyendo no solamente un rasgo especial de la imagen de la ciudad, sino un motivo de orgullo y sentido de propiedad patrimonial para sus habitantes quienes lo transitan diariamente.
Transitar por esta verdadera alfombra de piedra, será, para visitantes y lugareños un motivo de especial regocijo.
Autor: Néstor Sabattino Dossi, "Rocha: una ciudad para caminar..."