Emile Robert, un artista de music-hall de unos sesenta años, recibe en París un mensaje de Uruguay. Un tal Alfredo Quiroga dice haber encontrado, mientras ordenaba el antiguo apartamento familiar, una maleta que contenía objetos, fotos y cartas pertenecientes a su hermana Eurídice. Estas cartas, escritas en la década de 1970 y nunca enviadas, están dirigidas a él. Emilio va a Montevideo en busca de esta Eurídice, una joven estudiante uruguaya con la que había vivido un apasionado amor en los años setenta.